Si usted quiere conocer a Bukowski lea este libro.
Lo digo con total seguridad, este es el primer libro de Bukowski que uno tiene que leer en la vida, aquí nos cuenta acerca de su relación con su familia (bastante violenta), sus primeros recuerdos; gateando en su casa en Alemania, su infancia, adolescencia y como poco a poco Bukowski/ Chinaski se llega a convertir en la persona/personaje que tanto laureamos a través de los casi cincuenta años de carrera.
Aqui podremos encontrar además de cuentos y narraciones autobiográficas, una serie de poemas que han sido editados por el propio Jhon Martin, en una antología completisima y de super lujo. Les cuento que Jhon Martin fue su fiel editor, fue quien creyó en Charles cuando no era más que un cartero aficionado a escribir cuentos, Martin, dueño de la Black Sparrow Press le dió toda la posibilidad a Bukowski cuando en realidad nunca nadie lo había hecho, y que mina de oro que encontró. Gracias a ese talento para descubrir, su editorial se convirtió en la que rescató la obra de John Fante y una de las más prestigiosas a nivel mundial en lo que a poesía se trataba. Por lo que podemos decir que John Martin es un crá!
Un compilado de mordaces relatos autobiográficos, cada línea escrita, cada prosa fué un golpe a la realidad, totalmente autentico, me produjo el no querer mirar sin embargo seguir leyendo, tenía que saber que es lo que pasaba, si el padre de Bukowski realmente intentaría matarlo, como es que la madre jamás superó los engaños de su marido, como Henry se convirtió en aquel tipo duro que conocemos.
Les cuento un pasaje que me llamó mucho la atención, en el que Henry va a la casa de su amigo más cercano "Baldy", tenía doce años y el niño le comenta que su padre era médico cirujano pero que debido a su alcoholismo perdió la licencia y por eso tenían que vivir en un vecindario "poco agradable". En el sótano de la casa, un lugar húmedo y oscuro la familia guardaba barriles con vino de reserva, y Baldy lo reta a tomar un trago de este vino. Inmediatamente Henry como tipo duro en creación acepta sin tapujos, y la sensación inmediata al contacto con el vino es de bienestar total, cada vez que daba un trago se sentía mucho mejor que el anterior, cada vez sentía que era más invencible, y que se alejaba de todo, me llama profundamente a reflexionar acerca de que si este es el momento clave en el que Henry da el primer paso en el camino a sus años más ulcerosos y etílicos.
Cuenta también, a través de Henry que siempre estuvo peleando, siempre quiso con profundo afán matarlos a todos y cuando pensó en el suicidio lo vio también como un tipo de homicidio, ya que no se iría solo, si no que se llevaría a unos 8 mas consigo (por lo menos), por lo que me hace pensar que hubiera hecho explotar algo o explotaría con algún tipo de gas un lugar concurrido de la ciudad.
En este libro también y a modo de intertanto nos encontramos con la siempre afilada palabra lírica de Bukowski, poemas que trascienden los temas de la novela y nos invitan a quemarlo todo, muy distinto a lo que vimos en el comienzo de su carrera de poeta, en el que desarrollaba versos más largos y hermosos, mucho más cuidados, dejando encerrado el existencialismo de siempre, verso que podemos ver más adelante cuando toda palabra escrita por Bukowski era censurable y se convirtió en un cuchillo oxidado en el muslo de cualquier lector.
Siguiendo con esta prolifica carrera poética, Bukowski le dedica este libro a un compañero de letras, tan irreverente como lo ha podido ser él mismo, William Packard, se puede hallar correspondencia entre ellos, todo de tipo existencialista y el cambio de rumbo que ha tenido la poesía en el pasado siglo veinte, que fue el que los acogió a los dos como jóvenes poetas.
Todo el cambio en este libro se convierte en un animal dispuesto a rasgarte la yugular en cualquier momento de descuido, ya que tanto la poesía como la prosa mantiene un suspenso y una decadencia que va aumentando conforme también nuestro Henry va cumpliendo años,
No tengo mas para reseñar que decir que me voló la cabeza, una desgarradora poesía, una prosa totalmente imponente e inteligente que se cuela como ideas de malas influencias en la cabeza, un autor que suele perderse en su propia creación y la creación representando toda la depresión y las consecuencias de este individualismo que nos come vivos.
Por último pero no menos importante les comparto mi poema favorito de este libro, que al menos para mi significó un grito desesperado al estar expuesto constantemente a tanta indiferencia, porque todos tenemos algo noble, hasta el ser mas despreciable puede tener un gesto amable si es que se lo permite, aunque no lo sepamos ver, aunque no luchemos y nos dejemos llevar por nuestra crueldad descarnada, ahí estará siempre "el pájaro azul".
1 comentarios
Me encanto tu reseña, comparto tu gusto por las historias de Chinasky, aunque pienso que como primer libro de Bukowski, La senda del perdedor es el mas adecuado, este compilado pienso es el perfecto postre luego del plato principal ya comentado.
ResponderBorrarUn abrazo y a seguir reseñando!